La joven participante en 2015 en el programa Jóvenes cooperantes extremeños, Isabel Murillo Navia, en un proyecto de la ONG Fundación Humanismo y Democracia, cuenta cómo ha sido su experiencia así:
"Hace unos meses tuve la suerte de ser seleccionada por la bolsa de jóvenes cooperantes extremeños, un sueño hecho realidad que llevaba años persiguiendo.Esta iniciativa parte de la Junta de Extremadura, a través de la AEXCID y el Instituto de la Juventud. Mi experiencia formativa tuvo lugar en República Dominicana,un país increíble pero con grandes contrastes y diferencias sociales, y en un proyecto sobre Derecho Humano al Agua, con la colaboración de la Fundación Humanismo y Democracia. Este proyecto trata de mejorar la accesibilidad y abastecimiento de agua potable y saneamientos en zonas rurales y urbanas marginales ya que, un gesto tan sencillo como abrir el grifo y obtener agua en nuestra sociedad occidental, sigue siendo un lujo al alcance de muy pocos en muchas zonas del planeta. Con él se trata de paliar esas desigualdades en este mundo, aún muy injusto. El trabajo lo desarrollamos en el seno de dos contrapartes locales, el Instituto Dominicano de Desarrollo Integral (IDDI) y el Instituto Dermatología y de Cirugía de la Piel (IDCP) con su programa de lucha contra la lepra, ambas ubicadas en Santo Domingo.
Entre mis funciones estaban la colaboración en la gestión, coordinación y seguimiento, técnico y económico de las diversas acciones del proyecto (recogida de información, organización de la información, reuniones, etc.) y los viajes a terreno a las comunidades en zonas rurales, es ahí donde tomas contacto con la realidad, con la población beneficiaria, siempre tan motivada y agradecida.
Esta experiencia ha sido muy enriquecedora en cuanto a la mejora de mi formación y desarrollo profesional. Por un lado destaco todo lo aprendido sobre el enfoque en derechos humanos, y concretamente sobre el Derecho Humano al Agua y Saneamiento Básico, el acceso al agua potable y al saneamiento es esencial para llevar una vida digna y de respeto por los derechos humanos. Sin embargo, miles de millones de personas siguen sin disfrutar de estos derechos fundamentales y es uno de los grandes retos que tiene República Dominicana al que se unen mucho de los países del Sur. Los derechos al agua y saneamiento requieren que estos servicios estén disponibles y sean accesibles, seguros, aceptables y asequibles para todos/as, sin discriminación.
Igualmente la experiencia de trabajo en el seno de una ONGD ha contribuido favorablemente a mi experiencia, el poder ver cómo se desarrolla el trabajo, las dificultades a las que se enfrentan y la alta motivación con la que realizan su labor.
A nivel personal destaco el aprendizaje de vivir en contextos inseguros o de riesgo como la experiencia de la Tormenta Tropical Erika, el saber acomodarte a la falta de los servicios básicos, especialmente a la falta de agua. Y finalmente, el viaje a terreno de Haití con el programa de Seguridad Alimentaria, el país más empobrecido de América donde más del 80% de su población vive bajo el umbral de la pobreza, este viaje fue muy conmovedor, pero el conocer esa realidad también da mas motivación aún si cabe para seguir luchando por conseguir un mundo más justo y equitativo.
A modo de reflexión personal solo queda decir que esta experiencia me ha resultado muy grata y satisfactoria .He disfrutado cada momento, cadadía, cada experiencia que he vivido…
Traigo en mi maleta amigos/as, aprendizajes, lugares increíblemente bellos y un montón de habilidades y conocimientos que sin duda me va a servir de gran ayuda en mi futuro profesional, ya que la Cooperación Internacional al Desarrollo es mi vocación, es donde quiero dirigir mi futuro laboral, por lo que espero que esta experiencia me brinde la oportunidad de tener más opciones para incorporarme al mercado laboral, para así poder realizarme profesionalmente."